11 de Junio de 2018
César Nakazaki explicó que, en el caso de la terramoza ultrajada, la fiscal debió iniciar una investigación o adoptar las medidas cautelares necesarias.
Tras la indignación que generó el caso de la terramoza que fue ultrajada al no haber sido adecuadamente atendida por una fiscal, el abogado César Nakazaki comentó que un caso tan grave como lo es una violación agravada debe ser tomado como una emergencia penal, que no solo requiere de sensibilidad por parte de los fiscales, sino además el manejo inteligente de la legislación.
“Tan igual que el médico en un servicio de emergencia: primero atiendo y luego veo los temas administrativos. Eso debió suceder en este caso. La fiscal debió iniciar la investigación, adoptar o promover las medidas cautelares que pueda y, en el camino, la defensa tendría que haber discutido la competencia porque todas las diligencias que se hayan realizado”, manifestó el penalista.
En este sentido, explicó que, de no haber sido competentes el fiscal o el juez que hubiera atendido el caso, las diligencias realizadas no se habrían anulado, sino que pasarían a manos del fiscal o juez que corresponde.
Finalmente, Nakazaki señaló que casos penales como este deben ser atendidos como emergencias médicas, sobre todo al tratarse de delitos graves, donde la víctima requiere de una atención inmediata.
“La primera atención psicológica a la víctima es hacer que se sienta protegida. Y un Estado que le dice “ándate a Nazca”, obviamente no le daría ninguna protección; más bien estaría generando un daño psicológico tan igual que el violador”, sentenció.
